El líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan envió un mensaje al pueblo yazidí en Medio Oriente, en el marco de la Conferencia de la Ilustración de Shengal, en donde entre otras cosas se rememora el genocidio sufrido por esa sociedad en manos del Estado Islámico (ISIS) en 2014.
En la conferencia en Shengal (norte de Irak) participan numerosos académicos, activistas, representantes religiosos y periodistas de la región, principalmente de Bagdad, Suleimaniyah y Makhmour. También está presentes el Consejo Autónomo Democrático de Shengal, el Movimiento de Libertad de Mujeres Yazidi (TAJÊ), las YBŞ/YJŞ (Unidades de Resistencia de Shengal/Unidades de Resistencia de Mujeres), Êzîdxan Asayish (Fuerzas de Seguridad Interna Yazidi), organizaciones juveniles, la sociedad civil y eruditos religiosos.
Desde la isla prisión de Imrali, donde se encuentra encarcelado desde 1999, Öcalan envió un mensaje a la conferencia en el que saludó a los y las presentes y les deseó éxito en el trabajo que se realizará durante dos días.
El líder kurdo explicó que “la historia no solo habla del pasado; también abarca el dolor, la resistencia y la verdad que se han vivido junto a ello. El pueblo yazidí se encuentra entre los más honorables y antiguos portadores de esta verdad. Los yazidíes, una de las antiguas religiones de Mesopotamia, han preservado su existencia durante miles de años a pesar de la opresión, la migración forzada y la negación”.
“El yazidismo es más que una creencia y una tradición. Se basa en vivir en armonía con la naturaleza y en considerar sagrados todos los seres vivos -remarcó el fundador del PKK-. Por eso, los sistemas opresivos siempre han considerado a los yazidíes una amenaza, ya que han llevado las huellas de una vida igualitaria y libre hasta nuestros días.
Öcalan recordó que “ante la gran opresión, los yazidíes no se retiraron: buscaron refugio en las montañas de Kurdistán y se aferraron a su creencia en la historia y la libertad. Intentaron prohibir su fe y su idioma, pero se aferraron a su cultura y la mantuvieron viva. Ante la aniquilación, resurgieron de sus cenizas”.
El líder kurdo también afirmó que “las mujeres yazidíes son las principales pioneras de esta lucha. A pesar de sufrir los ataques más severos, nunca se rindieron. Con su resistencia en Shengal, reavivaron la esperanza de una vida digna, no solo para ellas, sino para todos los pueblos”.
“La lucha que libra hoy el pueblo yazidí nos muestra el camino a todos. Su voz es la de quienes buscan la libertad. Por lo tanto, proteger a los yazidíes equivale a defender la conciencia de la humanidad en defensa propia”, manifestó en el mensaje.
Para Öcalan, “el derecho más natural de los yazidíes es establecer su propio sistema para vivir libremente con su fe e identidad. Ni los Estados opresores ni las ideologías tribales de visión estrecha reconocen este derecho. Esto solo puede lograrse mediante un sistema basado en la hermandad y la igualdad entre los pueblos, con el que puedan gobernarse a sí mismos”.
“Todos deben saber esto: el pueblo yazidí no está solo. A pesar de todo el sufrimiento que ha padecido bajo 73 fermans (genocidios), ha sobrevivido hasta el día de hoy mediante la resistencia. Con el proceso de Paz y Sociedad Democrática que hemos desarrollado (dentro de Turquía), ya no experimentarán más fermans. Los fermans han terminado. Su presencia (la del pueblo yazidi) en esta región es un honor para todos los que anhelan la paz y la hermandad”, finalizó el líder kurdo.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina