Mujeres de diversas partes de Turquía se reunieron en Ankara el martes bajo el lema “¡Actúa ya! Crea la base legal para la paz”. La manifestación se concentró frente al Parlamento para enviar un mensaje claro a favor de una solución pacífica y democrática a la cuestión kurda. Exigieron que la Asamblea Nacional turca cree de inmediato una base legal para una paz justa y duradera.
La acción fue organizada por la iniciativa de mujeres “Necesitamos paz”. Numerosas integrantes de organizaciones de la sociedad civil, el movimiento de mujeres kurdas, sindicatos y partidos políticos se dirigieron a la capital del país desde varias ciudades. El objetivo era realizar una movilización desde el Parque Güven hasta el Parlamento. Sin embargo, al llegar al parque la policía bloqueó los autobuses en los que viajaban las participantes y les impidió bajar. Los conductores fueron presionados con amenazas de sanciones y algunos se vieron obligados a retirar sus vehículos.
¡Jin, Jiyan, Azadî!
A pesar de estas restricciones, las mujeres finalmente lograron reunirse en la entrada del Parlamento, en Çankaya. Hicieron visibles sus demandas con pancartas que decían “Retiren los fideicomisarios (interventores estatales)”, “Involucren a las mujeres en las conversaciones de paz” y “Abolición de la ley antiterrorista”, y lemas como “Jin, Jiyan, Azadî” (Mujer, Vida, Libertad), “No a la guerra, paz ahora” y “Bijî Serok Apo” (Viva el Presidente Apo), en referencia al líder kurdo encarcelado Abdullah Öcalan.
En una declaración conjunta, Feride Eralp, de la iniciativa, y Zelal Anğay, de la federación sindical KESK, enfatizaron que ya no es aceptable que se criminalicen las demandas de paz. Afirmaron que la actual política de violencia, represión y fideicomisarios no contribuye a una solución, sino que exacerba la división social. En cambio, destacaron la necesidad de un cambio fundamental. “Exigimos una base legal para la paz, no mañana, sino ahora”, dijeron.
Las demandas centrales de la manifestación fueron la abolición de la ley antiterrorista, que sirve de base jurídica a numerosos procedimientos arbitrarios contra periodistas, políticos y activistas; la liberación de las y los presos políticos y el fin de la criminalización de la oposición democrática; y la retirada de los fideicomisarios de los municipios kurdos y la restauración de las estructuras democráticas locales.
Eralp advirtió contra la limitación de la demanda de paz a medidas individuales como la liberación de presos: “El gobierno intenta reducir el tema de la paz a la cuestión de los presos políticos. Pero la paz necesita más: justicia, participación e igualdad. Los procesos de paz no pueden surgir en condiciones de guerra, escalada militar y opresión patriarcal”.
Duras críticas a la violencia militar en curso
Las activistas criticaron especialmente las operaciones de ocupación transfronteriza del ejército turco en la región del Kurdistán iraquí (Bashur). A pesar del reciente anuncio de la autodisolución del PKK (Partido de los Trabajadores de Kurdistán), el gobierno turco no ha cesado sus ataques militares. Tan solo en los últimos días, doce soldados turcos murieron en un supuesto accidente con gas metano durante una operación militar en la región. “Estas muertes demuestran lo absurda y destructiva que es la política actual para todas las partes”, declaró Eralp.
Las manifestantes señalaron que el sistema de fiduciarios, utilizado especialmente en ciudades kurdas para destituir a alcaldes electos y reemplazarlos por funcionarios gubernamentales, es también expresión de un Estado autoritario que socava las estructuras democráticas: “Turquía se ha convertido en una república de fideicomisarios”, expresó Eralp, señalando que más de una docena de municipios kurdos se encuentran actualmente bajo administración fiduciaria y muchos otros alcaldes se encuentran bajo custodia.
¡Haga arreglos legales ahora!
La ex coalcaldesa de Amed (Diyarbakır, en turco) y reconocida política Gültan Kışanak se dirigió directamente a las parlamentarias: “Cada mujer que ocupa un escaño en el Parlamento hoy tiene una responsabilidad. No son solo parlamentarias, también son hijas, madres, hermanas: ¡escuchen a sus corazones!”, dijo Kışanak y agregó: “Si se ha iniciado un proceso político, el Parlamento debe emprender acciones legales”.
Al recordar la decisión del PKK de disolverse y desarmarse, anunciada en mayo, Kışanak señaló que el Estado turco también tiene el deber de responder a esta medida. “Ahora deben promulgarse leyes que les permitan reincorporarse a la sociedad, a la política y a una vida con igualdad de derechos. Exigimos una política basada en la libertad, la justicia y la democracia, no en la opresión, la desconfianza y la violencia”, manifestó.
Las mujeres insisten en participar en el proceso de paz
Zelal Anğay concluyó la manifestación señalando que la acción en Ankara es más que una simple protesta, es una expresión de la creciente presión social sobre la clase política para romper la espiral de violencia que dura décadas. “Las mujeres dejaron claro una vez más que no solo son víctimas de la guerra y la represión, sino también agentes activas de la paz y la justicia. Con nuestro llamamiento al parlamento, exigimos una base legal para una nueva era. Y lo dejamos claro: sin mujeres, sin igualdad de derechos, sin participación, no puede haber una paz duradera”, finalizó
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina