Kongra Star, la principal organización de mujeres kurdas en el norte y este de Siria, criticó duramente las últimas declaraciones del embajador estadounidense en Turquía y enviado especial para Siria, Thomas Barrack.
En una declaración reciente, Barrack enfatizó la fórmula “un país, un pueblo, un ejército” para Siria y se pronunció en contra de soluciones federales o descentralizadas.
El lunes, desde Kongra Star indicaron que después de décadas de gobierno autoritario, guerras y políticas de asimilación fallidas, Siria ahora enfrenta una oportunidad histórica.
A continuación publicamos el comunicado completo:
Ante las delicadas transformaciones que atraviesa Siria tras más de quince años de crisis y guerra, y en vista de las declaraciones del embajador Thomas Barrack sobre las negociaciones entre la Administración Autónoma Democrática del Norte y Este de Siria (AADNES) y el gobierno de transición de Damasco, en Kongra Star destacamos la importancia del papel que pueden desempeñar los mediadores internacionales en esta delicada etapa, siempre que sea un papel constructivo y neutral que apoye la voluntad del pueblo sirio en toda su diversidad.
Agotada por las guerras, el autoritarismo y las políticas excluyentes durante más de seis décadas de gobierno baazista, Siria se encuentra ahora ante una oportunidad histórica para reconstruirse sobre nuevas bases, impulsadas en la justicia, la igualdad y el reconocimiento de la diversidad cultural y social que constituye la esencia de la identidad siria. Los últimos años han demostrado que las políticas centralizadas y la negación de los derechos de las diversas comunidades fueron causas clave de la crisis. Por lo tanto, cualquier diálogo nacional que no considere las demandas de todas las comunidades, especialmente las mujeres y las fuerzas que han estado a la vanguardia de la lucha, será incompleto y destructivo.
En Kongra Star creemos que la mediación debe centrarse en crear un clima de confianza mutua entre las partes sirias y en apoyar una solución liderada por Siria que logre la seguridad y la estabilidad, y garantice la participación genuina de todas las comunidades en la construcción del futuro del país. Este diálogo debe basarse en los principios de la democracia y la descentralización, que constituyen verdaderas garantías contra el retorno a la guerra y la división.
Como movimiento de mujeres, consideramos que el reconocimiento de los derechos de las mujeres y su papel pionero en la reconstrucción de una nueva Siria es una condición fundamental para lograr la justicia y una verdadera reconciliación. La paz en Siria no puede construirse sin garantizar los derechos y la dignidad de las mujeres, y ningún proceso político puede prosperar sin la verdadera inclusión de las mujeres.
Finalmente, afirmamos que la salvaguardia de la integridad territorial de Siria no puede lograrse con consignas, sino mediante el reconocimiento de la diversidad, el respeto a la voluntad popular y el establecimiento de un sistema democrático descentralizado que garantice los derechos y las libertades. Por lo tanto, hacemos un llamamiento al gobierno de transición y a los mediadores internacionales, en particular a Estados Unidos, para que desempeñen un papel responsable e histórico para sacar a Siria de la oscuridad y conducirla hacia un futuro compartido, democrático, seguro y justo para todos sus hijos e hijas.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina