Los comicios municipales en el norte y el este de Siria, previstos para el 11 de junio, fueron aplazados por las autoridades electorales de la región para el próximo 8 de agosto. Esta decisión se basó en una petición de los partidos políticos y las alianzas que participan en el proceso electoral. El motivo es el apretado calendario de la campaña y la necesidad de disponer de tiempo suficiente para comunicarse con las organizaciones internacionales que observarán las elecciones. Igualmente, publicamos el siguiente artículo de Hoshang Hasan -con fecha original del 4 de junio de 2024-, ya que analiza unas elecciones inéditas no sólo para Kurdistán, sino para Medio Oriente en su conjunto.
La Administración Autónoma Democrática del Norte y Este de Siria (AADNES) se está preparando para celebrar elecciones municipales en todas las regiones del noreste de Siria controladas por las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS). Las elecciones serán las primeras desde 2017, tras la expansión geográfica de la AADNES tras la derrota territorial de ISIS y un proceso de dos años de intensas discusiones y debates que llevaron a la ratificación de un nuevo Contrato Social a principios de este año.
La Alta Comisión Electoral recientemente formada afirmó que 5336 candidatos se presentarán a las elecciones para coalcaldes y consejos en más de 134 municipios. El Contrato Social estipula un sistema de coalcaldía, en el que el poder es compartido por un hombre y una mujer en cada municipio.
La Comisión dijo al Instituto Kurdo para la Paz que más de dos millones y medio de votantes distribuidos en siete provincias (Al-Jazeera, Deir Ez-Zour, Raqqa, Al-Furat (incluida Kobane), Manbij, Afrin y Al-Shahba, y Tabqa) tienen derecho a votar en estas elecciones. La Comisión distribuyó tarjetas electorales a la población. También destinó 1792 centros electorales para recibir a los electores, quienes emitirán su sufragio en 2113 casillas electorales.
Las elecciones locales llevan mucho tiempo sobre la mesa. Surgieron como una recomendación clave de la conferencia de los “Hijos de Jazeera y el Éufrates”, celebrada en la región de Hasakah en noviembre de 2020, que acogió a más de 300 personalidades que representan el diverso espectro de los componentes políticos, sociales y tribales de las comunidades locales. El proceso electoral se retrasó hasta que se ratificara el nuevo Contrato Social. También se vio perturbado por las continuas amenazas a la seguridad que enfrenta la región, especialmente de Turquía, ISIS y las milicias respaldadas por Irán, así como por la incertidumbre sobre la presencia de Estados Unidos en la región.
Las últimas elecciones locales en el noreste de Siria se celebraron a finales de 2016. Desde entonces, el territorio de la administración se extendió hasta incluir regiones de mayoría árabe liberadas de ISIS con el apoyo de la Coalición encabezada por Estados Unidos, incluidas las regiones de Raqqa y Deir Ez-Zour. Una vez celebradas, las elecciones serían las primeras en estas regiones desde el inicio del conflicto sirio. A pesar de muchos desafíos, la relativa atmósfera de seguridad y las demandas locales de reformas administrativas y una mejor gobernanza allanaron el camino para el tan esperado proceso electoral.
La AADNES pretendía prepararse bien para el proceso, a pesar de los muchos desafíos que ha enfrentado: desde la dinámica de seguridad hasta la capacidad y los recursos humanos calificados. La Alta Comisión Electoral ha pedido a todos los partidos que deseen participar que se registren y compitan. También llamó a organizaciones internas de la sociedad civil y entidades externas a observar el proceso.
Berivan Omar, candidata a la alcaldía de Qamishlo, afirmó en su entrevista con el Instituto Kurdo para la Paz que participa en estas elecciones por su deseo de ofrecer los mejores servicios a los residentes de la ciudad. Indicó que se concentrará en proyectos ambientales si es elegida.
Omar se postula en la lista “Pueblos y Mujeres por la Libertad”, la alianza electoral más grande. Esta lista incluye 22 entidades políticas, incluido el Partido de la Unión Democrática (PYD) y el Kongra Star, el principal movimiento de mujeres de la región. Otra alianza es “Juntos para Proporcionar Mejores Servicios”, que incluye a otros cinco partidos, entre ellos el Partido Verde de Kurdistán. Algunos otros partidos y figuras se presentan de forma independiente.
Bilind Hassan, residente de Al-Hasakah, dice que participará en las elecciones. Espera que se solucione el problema del agua en la ciudad. Hasakah sufre sed desde 2019, después de que Turquía ocupara la ciudad de Serekaniye (Ras al-Ayn) y cortara el suministro de agua potable de la región desde la estación de Alouk. A principios de 2024, los ataques con drones turcos cortaron por completo el suministro de energía a la estación. Los residentes han estado obteniendo agua a través de camiones cisterna, lo que ha solucionado el problema sólo parcialmente. Actualmente, el agua potable es la mayor esperanza de los residentes de la ciudad a medida que se acercan las condiciones climáticas abrasadoras.
Por otro lado, Khalil Muhammad, residente de la ciudad de Qamishlo, sigue indeciso sobre por quién votará. Lo vital para él es un candidato que brinde mejores servicios al público, independientemente de su afiliación.
Las elecciones también están atrayendo la atención externa hacia la región. Turquía, que se opone a la administración local, no ha escatimado oportunidades para expresar su descontento con las medidas que podrían consolidar legítimamente el status quo en el norte y el este de Siria. El jefe del Partido Acción Nacionalista (MHP), de extrema derecha, Devlet Bahceli, aliado político del presidente turco Recep Tayyip Erdogan, dijo que “estas elecciones son un intento de dividir Siria bajo el disfraz de la democracia”.
Bahceli afirmó que Turquía debería coordinarse con el gobierno sirio para lanzar una operación militar para destruir las FDS y a la AADNES. Criticó el apoyo de Estados Unidos a las FDS y las consideró una grave amenaza para la seguridad de Turquía, y pidió a Washington que retire inmediatamente sus fuerzas de Siria e Irak, como lo hizo en Afganistán. La intensidad de las amenazas turcas y el rechazo a las elecciones locales en el noreste de Siria han aumentado. Los residentes locales, que quieren la paz después de más de diez años de guerra, temen ahora una nueva serie de ataques en su región.
El portavoz estadounidense del Departamento de Estado, Vedant Patel, respondió a una pregunta sobre el asunto diciendo: “Nos han oído decir esto antes de que cualquier elección que tenga lugar en Siria debe ser libre, justa, transparente e inclusiva, como lo exige el Consejo de Seguridad de la ONU y su Resolución 2254, y no creemos que en la actualidad se den las condiciones para tales elecciones en el noreste de Siria. Y lo hemos transmitido a una variedad de actores en el noreste de Siria”.
Aunque existen desafíos para el proceso electoral, dichas elecciones se alinean perfectamente con los objetivos de los esfuerzos de estabilización de Estados Unidos y los intentos de otorgar a los locales una mayor inclusión y representación dentro de los órganos administrativos. Este proceso también refleja demandas locales de larga data y el entusiasmo por elegir quién está a cargo en su comunidad.
Si bien el conflicto sirio sigue activo y no existe la perspectiva de un proceso político genuino a nivel nacional, las autoridades de facto tienen todo el derecho a tomar las medidas que consideren necesarias para calmar y reducir la tensión, y escuchar las demandas y quejas de sus electores y de la población local para una mejor prestación de servicios y una mayor voz en la toma de decisiones y la gobernanza.
FUENTE: Hoshang Hasan / Fecha de publicación original: 4 de junio de 2024 / Kurdish Peace Institute / Traducción y edición: Kurdistan América Latina
 
 
				