Los códigos de la modernidad democrática a través de la crítica de la modernidad capitalista

“El verdadero socialismo une la libertad individual con la solidaridad social. No es la igualdad forzada, sino la cooperación voluntaria y la ayuda mutua la que constituye la base de una sociedad libre”

(Piotr Kropotkin)

En el texto “Perspectiva”, presentado ante el XII Congreso del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), Abdullah Öcalan afirma: “Marx comienza la historia con la clase. Sin embargo, la verdadera problemática no comienza con la clase, sino con la sociabilidad de las mujeres” (1). Una de sus críticas más originales y profundas al socialismo real radica en que estos sistemas consideraban la libertad de las mujeres un asunto secundario y no cuestionaban suficientemente las estructuras patriarcales durante los procesos revolucionarios.

Según Öcalan, si bien el socialismo de estilo soviético integró a las mujeres en la producción, no logró la transformación ética, ideológica y organizativa necesaria para convertirlas en sujetos políticos (2). Esto demuestra cómo las estructuras sexistas se reprodujeron sin ser abordadas críticamente dentro de los movimientos revolucionarios. Öcalan argumenta que la verdadera medida de la idea de libertad es el nivel de liberación de las mujeres. Las mujeres deben ser vistas no sólo como una clase o identidad, sino como los primeros seres colonizados de la historia de la civilización y, por lo tanto, deben desempeñar un papel central en la superación de todas las formas de dominación.

Este enfoque se superpone directamente con las críticas feministas anarquistas, que señalan el patriarcado como una forma estructural de dominación que persiste no solo en el capitalismo, sino también en los sistemas socialistas. El concepto de Jineolojî, desarrollado por Öcalan, introduce un nuevo marco científico centrado en el conocimiento histórico y social de las mujeres, redefiniendo el paradigma de la libertad no sólo en términos económicos o de clase, sino como una revolución de género (3).

En el mismo texto, Öcalan continúa: “Creo que es más preciso repensar el marxismo que aplicarlo directamente. La historia no es una historia de lucha de clases, sino de conflicto entre el Estado y la comuna… Si Marx hubiera comprendido a Bakunin y Lenin hubiera comprendido a Kropotkin, el destino del socialismo sin duda habría evolucionado de forma diferente” (1). Aquí, Öcalan sustituye la teoría marxista de clases por la organización comunal.

Esta tensión teórica entre Bakunin y Marx no sólo debe interpretarse como una divergencia dentro del pensamiento revolucionario del siglo XIX, sino también como una división estratégica que continúa influyendo en los movimientos sociales de los siglos XX y XXI. Asimismo, resuena profundamente en la propia evolución ideológica de Öcalan. Si bien inicialmente defendía una visión marxista-leninista según la cual el Estado era una herramienta de dominación de clase y debía ser controlado por el proletariado, después de 1999 viró hacia una postura que critica al Estado como la base institucional de todas las formas de poder y dominación (4).

Esta transformación indica una síntesis entre el antiestatismo de Bakunin y los conceptos de ecología social y municipalismo libertario de Bookchin (4). Al rechazar el Estado no como medio de liberación, sino como una forma de dominación que debe superarse, Öcalan también se distancia radicalmente de la estrategia marxista clásica. Bajo el concepto de modernidad democrática, se propone construir un nuevo paradigma de libertad (5).

El concepto de Öcalan de “modernidad democrática” constituye un contraparadigma holístico frente al aparato estatal centralizado, la economía industrialista y la formación del Estado nación propios de la modernidad capitalista. Propone no sólo una alternativa económica o política, sino también una ruptura ideológica destinada a transformar las relaciones entre los seres humanos y la naturaleza, los regímenes de género y las narrativas históricas.

Esta orientación teórica se basa, en gran medida, en el pensamiento de Murray Bookchin y establece fuertes vínculos con la teoría anarquista (6). Frente al poder estatal centralizado, Öcalan propone modelos de autogobierno local basados ​​en asambleas populares, que se convierten en fundamentales dentro de su sistema de confederalismo democrático.

La definición de modernidad democrática de Öcalan representa una clara ruptura con la trayectoria de modernización marxista-leninista, a la vez que se solapa significativamente con las críticas históricas del anarquismo (7). Para Öcalan, la modernidad es un sistema de dominación multidimensional, reforzado no solo por las relaciones de producción capitalistas, sino también por el patriarcado, el nacionalismo y la ciencia positivista. En respuesta, la modernidad democrática se centra en una forma de vida anticapitalista, antiautoritaria, antijerárquica y ecológica (8). En este sentido, el paradigma de Öcalan comparte supuestos fundamentales con los ideales anarquistas de apatridia, descentralización y democracia directa.

Sin embargo, la comprensión de Öcalan de la modernidad democrática no coincide plenamente con la teoría anarquista, sino que se encuentra en una tensión creativa con ella. Mientras que el pensamiento anarquista rechaza categóricamente el Estado, Öcalan lo conceptualiza como una “necesidad histórica” que hoy debe trascenderse como forma de poder. Por lo tanto, su crítica del Estado se alinea más con el enfoque de Bookchin sobre la “extinción del poder” a través de las estructuras locales que con el rechazo rotundo de Bakunin.

Además, el paradigma de Öcalan pone un énfasis considerable en las identidades colectivas y la memoria histórica de los pueblos, lo que lo distingue de las tendencias más universalistas e individualistas presentes en algunas teorías anarquistas (9). Por lo tanto, la modernidad democrática puede interpretarse como un proyecto de libertad que reinterpreta los principios anarquistas en el contexto histórico, cultural y político de Medio Oriente.

Notas:

1- Abdullah Öcalan, “La perspectiva del 12º Congreso del PKK”, 2025.

2- Abdullah Öcalan, Problemas actuales de la sociología, Aram Publishing, 2007.

3- Dilar Dirik, El movimiento de mujeres kurdas: historia, teoría, práctica, Pluto Press, 2022.

4- Janet Biehl, Ecología o catástrofe: La vida de Murray Bookchin, Oxford University Press, 2015.

5- Abdullah Öcalan, Manifiesto por una civilización democrática, Volumen 1, Aram Publishing, 2009.

6- Murray Bookchin, El auge de la urbanización y el declive de la ciudadanía, Black Rose Books, 1992.

7- Mijaíl Bakunin, Estatismo y anarquía, Cambridge University Press, 1990.

8- David Graeber, Fragmentos de una antropología anarquista, Prickly Paradigm Press, 2004.

9- Peter Marshall, Exigiendo lo imposible: una historia del anarquismo, HarperCollins, 1992.

Para leer la primera parte, click aquí

Para leer la segunda parte, click aquí

FUENTE: Ercan Jan Aktas / BIANET / Traducción y edición: Kurdistán América Latina

lunes, septiembre 1st, 2025