El Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK) celebró su XII Congreso del 5 al 7 de mayo en las Zonas de Defensa de Medya, en Bashur (región kurda de Irak). Las decisiones tomadas durante el congreso y la declaración final se dieron a conocer al público el 12 de mayo. Sabri Ok, miembro del Consejo Ejecutivo de la Unión de Comunidades de Kurdistán (KCK), participó del encuentro y en su discurso conmemoró a todas y a todos los mártires de la revolución, en especial a Ali Haydar Kaytan y Rıza Altun, dos de los miembros fundadores del PKK.
A continuación compartimos las evaluaciones presentadas por Sabri Ok:
No debería haber tristeza por la transformación del PKK. El presidente Abdullah Öcalan acogió este momento con alegría. Confía en sí mismo y en el futuro que busca construir. Por eso dice: “Esta es mi voluntad, es mi responsabilidad”. Digan lo que digan, afirma claramente que el PKK se disolverá. Tenemos 52 años de historia que bastan para todo el mundo. Hubo una época en que estudiábamos la historia mundial en detalle para comprender cómo luchar y cómo organizarnos. Pero ahora, incluso si se reuniera todo eso, no equivaldría ni a la mitad de lo que el PKK ha llegado a representar. Hemos aportado algo de esta magnitud al mundo y a la historia de la humanidad. Sí, esto es un valor, no solo para nosotros y nosotras, sino para toda la humanidad. El PKK es un espíritu, una moral, una forma de vida. Por encima de todo, es el presidente Öcalan. Y siempre decimos que somos apoístas. Todos los grandes líderes son así; los profetas también.
El presidente Öcalan quiere abrir las puertas a una nueva era. Busca construir una sociedad democrática, una unidad democrática. Esta debe moldearse según los tiempos, el proceso actual y el contexto global. Debemos comprender su espíritu. Y debemos responder en consecuencia.
Tales individuos nacen solo una vez por siglo. Surgen, pero se reconocen tarde. La verdad que representan a menudo se aclara solo años después. En diez o veinte años, ningún líder o profeta ha logrado presentarse al mundo como lo hizo el presidente Öcalan. Öcalan previó lo que se avecinaba. Del siglo XX al XXI, a partir de 2025, ninguna otra organización o partido en el mundo ha resistido y luchado como el PKK.
El mundo ha cambiado. El presidente Öcalan quiere abrir las puertas a una nueva era. Busca construir una sociedad democrática, una unidad democrática. Esta debe moldearse según los tiempos, el proceso actual y el contexto global. Debemos comprender su espíritu. Y debemos responder en consecuencia.
Debemos vivir según el sistema de pensamiento estratégico del presidente Öcalan, comprendernos a través de él y moldear nuestra perspectiva en consecuencia.
El PKK una vez abogó con más fuerza que nadie por un Estado independiente. Ese fue nuestro lema. Incluso hablamos de un Estado kurdo unido. Pero ahora, el presidente Öcalan busca unir a la nación kurda y la libertad del pueblo kurdo en las cuatro partes de Kurdistán. Ya no se adhiere al paradigma que seguíamos durante la era de aspirar a un Estado nación. Define y redefine conceptos según las necesidades de la época. Y cada definición que ofrece tiene un significado. El concepto socialista de una sociedad democrática fue introducido por el presidente Öcalan. Nadie más había usado tal terminología antes. Estos conceptos son nuevos no solo para el Kurdistán Norte (Bakur, sudeste turco) y las cuatro partes de Kurdistán, sino para todo el mundo. Se ha comprometido con el marxismo, lo ha cuestionado y ha explorado lo que debe suceder. El presidente Öcalan quiere que interioricemos y experimentemos la profundidad que ha alcanzado. Debemos vivir según el sistema de pensamiento estratégico del presidente Öcalan, comprendernos a través de él y moldear nuestra perspectiva en consecuencia.
Podemos tomar la iniciativa. Podemos actuar en asuntos que dependen de nuestra voluntad y nuestra mente. Pero también hay situaciones que escapan a nuestro control. Si, a pesar de todos nuestros esfuerzos, el Estado turco insiste en continuar la guerra, lo cual sigue siendo una posibilidad real, todo esto debe tenerse en cuenta. El lenguaje refleja la mentalidad. El presidente Öcalan siempre ha dicho: “No hay ocupación en el mundo comparable a la que vive el pueblo kurdo”. Y, de hecho, una situación así nunca antes se había producido. Incluso los métodos propuestos para resolver este problema no tienen precedentes a escala mundial. Como ya he dicho, un académico señaló que el método del PKK para abordar los problemas y la guerra nunca se ha visto ni oído en ningún otro lugar. Porque en estos casos, siempre ha habido un mediador externo. Pero en nuestro caso, no lo hay. El presidente Öcalan comprende bien por qué no existe esta tercera fuerza.
El Estado turco se encuentra en una situación tal que no puede avanzar ni retroceder. Ante la verdad del presidente Öcalan y el paso histórico que pretende dar, es nuestro deber y responsabilidad entrar en esta nueva etapa con gran moral, conciencia y resistencia. Crean en ustedes mismos. Confíen en el presidente Öcalan. Pero también debemos comprender esto: estamos en estado de guerra. Nadie puede predecir qué sucederá, dónde ni cuándo. Nuestros reflejos, nuestras vidas y nuestros esfuerzos deben moldearse siempre en consecuencia.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina