La población del norte y el este de Siria se ha movilizado en todas las esferas de la vida para proteger su región y los logros de la revolución en Rojava contra los ataques constantes del Estado turco y las facciones que apoya Ankara.
Las mujeres que viven en el pueblo de Helîncê (Halinja), cerca de Kobanê, cocinan para apoyar a sus combatientes. Las integrantes de la Comuna de Mujeres Mártires Medya preparan comidas y las envían a los combatientes que resisten los ataques.
“Cocinamos para apoyar a los combatientes”, afirma Hacîre Kenco, una de las mujeres. “Somos madres y hermanas de los combatientes y cocinamos para apoyarlos. Estamos orgullosas de nuestros hijos y siempre los apoyamos”.
Hacîre también habló de la resistencia contra los ataques turcos contra la presa de Tishreen. “Nuestros combatientes llevan más de 40 días luchando contra los ataques de la ocupación a la presa de Tishreen -indicó-. Los combatientes de las FDS (Fuerzas Democráticas Sirias) son hijos de la gente de esta región. Los jóvenes de nuestro país también son nuestros hijos, por eso queremos ayudarlos y apoyarlos. Siempre estaremos con nuestros combatientes. Larga vida a nuestros combatientes”.
“Los combatientes defienden su región”, afirmó Necmê Misî, condenando los ataques turcos en el norte y el este de Siria.
“Como mujeres de Helîncê, cocinamos para los combatientes y los apoyamos”, dijo Fîroz Xelîl. “El Estado turco será derrotado, tal como lo fue el ISIS en Kobanê. No abandonaremos nuestra patria ni nuestro país. ¿Quiénes son los combatientes de las FDS? Son los hijos de esta región, de este país. El Estado turco no puede quebrantar nuestra firme voluntad utilizando sus aviones de guerra y armas pesadas”, finalizó.
FUENTE: Elvín Mihemed / JINHA / Traducción y edición: Kurdistán América Latina