Libertad para Abdullah Öcalan y una solución política a la cuestión kurda

El 10 de octubre de 2023 se lanzó una campaña mundial en defensa de la libertad del líder kurdo Abdullah Öcalan y de una solución política a la cuestión kurda. Hatip Dicle, en una entrevista reciente, reflexionó sobre el progreso actual de la campaña y su trayectoria futura.

Dicle es una figura importante en la política kurda desde hace décadas, defendiendo los derechos y las libertades del pueblo kurdo en Turquía. Su carrera se forjó durante un período de intensa represión política contra los activistas kurdos y se convirtió en un ardiente defensor de la resolución pacífica de la cuestión kurda.

En 1991, fue elegido miembro de la Gran Asamblea Nacional Turca como miembro del Partido del Trabajo Popular (HEP). Sin embargo, la represión del Estado turco contra los movimientos políticos kurdos condujo a su encarcelamiento junto con otros miembros del Partido de la Democracia (DEP) después de que se les retirara la inmunidad en 1994. Pasó diez años en prisión, durante los cuales se convirtió en un símbolo de la lucha kurda por la autodeterminación.

Tras su liberación, Dicle reanudó sus actividades políticas y desempeñó un papel clave en el proceso de paz entre el gobierno turco y el Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), con el líder Abdullah Öcalan en el centro de las negociaciones. Dicle fue reelegido para el Parlamento turco en 2011, pero se le negó un escaño debido a una condena previa. Desde hace ocho años, Dicle vive en Alemania.

-¿Cuáles fueron las consecuencias del proceso conocido como la “conspiración internacional” -que implicó la expulsión forzada de Abdullah Öcalan de Damasco por parte del gobierno sirio el 9 de octubre de 1998 y su posterior secuestro de Kenia a Turquía por parte de la inteligencia turca el 15 de febrero de 1999- para la política kurda y la política internacional?

-Estamos conmemorando un nuevo aniversario de la conspiración del 9 de octubre. El 9 de octubre se cumplieron 26 años y entramos en el año 27. En este contexto, puedo decir lo siguiente: Öcalan es un distinguido pensador y filósofo de nuestro tiempo. Encarcelar a una persona así en una celda aislada en una isla es, ante todo, un crimen contra la humanidad. Por lo tanto, los que están detrás de esta conspiración están condenados por el juicio infalible de la historia y son culpables.

¿Qué significó esta conspiración para el pueblo kurdo? Le causó un gran daño. Öcalan había partido hacia Europa en busca de la paz, pero el camino hacia una solución pacífica fue bloqueado por más de 20 países, incluidos Estados Unidos y varios Estados europeos, todos los cuales desempeñaron un papel en esta conspiración. Al actuar así, cometieron un grave crimen, no solo contra el pueblo kurdo sino contra todo el pueblo, porque aseguraron la continuación de la guerra, en la que el pueblo kurdo sacrificó a casi 50.000 de sus hijos.

Del mismo modo, los hijos del pueblo turco enviados como soldados también sufrieron decenas de miles de bajas. Por lo tanto, esta conspiración contra Öcalan se saldó con la muerte de decenas de miles de personas.

Otro aspecto importante es que la conspiración envalentonó a la República turca para persistir en su política de evitar una solución. Los países implicados en esta conspiración dieron a Turquía la confianza para continuar por ese camino.

La larga duración de la guerra ha tenido también un enorme coste financiero para nuestros pueblos. Se calcula que se han gastado 4,3 billones de dólares en esta guerra, una cifra confirmada por datos científicos, no es algo que diga a la ligera. Por tanto, esta conspiración ha sido un desastre no sólo para Öcalan y el pueblo kurdo, sino también para los pueblos turco y de Oriente Próximo. Los conspiradores son culpables a los ojos de la historia. Aunque no rindan cuentas ante un tribunal de justicia, serán condenados por la conciencia del pueblo, eso es seguro.

-El 10 de octubre de 2023 se lanzó a nivel mundial la campaña “Libertad para Abdullah Öcalan: una solución política a la cuestión kurda”. ¿Cómo valora el desarrollo de esta campaña?

-Como saben, el 10 de octubre de 2023 se puso en marcha la campaña internacional y global “Libertad para Abdullah Öcalan y una solución política a la cuestión kurda”. Podemos compararla con el movimiento por la libertad de Nelson Mandela en los años 1970 y 1980. Al igual que Mandela, que pasó 27 años en una prisión insular, Öcalan lleva preso en una isla desde 1999. Sin embargo, sus derechos se han visto gravemente violados: no ha tenido contacto con el mundo exterior durante más de 42 meses. Su situación se parece más a la de un rehén que a la de un preso normal, y sus derechos se han visto gravemente violados. Las visitas familiares están extremadamente limitadas y no ha tenido contacto con el mundo exterior durante más de 42 meses (tres años y medio, en realidad).

Esta campaña se lanzó para abordar estas injusticias. Como parte de la campaña, intelectuales, escritores, líderes de la sociedad civil y activistas de 75 países y más de 120 ciudades organizaron conferencias de prensa y seminarios para pedir la libertad de Öcalan y una solución a la cuestión kurda. Han organizado eventos para leer los libros de Öcalan y le han enviado cientos de miles de cartas, pero no está claro si le han llegado.

Se debatió sobre la manera en que las ideas de Öcalan, en particular el paradigma de un mundo democrático y pacífico, podrían ofrecer soluciones a los problemas actuales. También se enviaron cartas al Consejo de Europa y al Comité para la Prevención de la Tortura (CPT) pidiendo que se tomen medidas. Recientemente, 69 premios Nobel, encabezados por Jody Williams, pidieron la liberación de Öcalan, y respondieron varias organizaciones internacionales, entre ellas el Consejo de Europa y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

-¿La iniciativa del 10 de octubre tuvo el impacto deseado en la opinión pública nacional e internacional?

-El objetivo final es la libertad de Öcalan. Sin embargo, para que se produzca un progreso satisfactorio, al menos es necesario que se le restablezca el derecho a la comunicación. Según el Convenio Europeo de Derechos Humanos, del que Turquía es parte, el “derecho a la esperanza” es un derecho fundamental de todo preso condenado a cadena perpetua. Legalmente, Öcalan tiene derecho a la libertad.

Ninguno de estos objetivos se ha hecho realidad todavía, pero hay una concienciación significativa, especialmente entre los grupos de izquierda, socialistas, democráticos y verdes. La comunidad internacional reconoce cada vez más que el declive de los valores democráticos de Turquía está directamente relacionado con la cuestión kurda, aún no resuelta. Desde el fracaso del proceso de paz con Öcalan, Turquía se ha alejado cada vez más de la democracia.

A medida que más personas leen la obra de Öcalan, sus ideas van ganando simpatía. Su visión de un Oriente Próximo democrático resuena en todo el mundo.

-¿Cómo han respondido las instituciones europeas como el Consejo de Europa y el CPT a esta campaña internacional?

-Como he mencionado antes, el CPT está autorizado a inspeccionar las prisiones, especialmente en los Estados miembros del Consejo de Europa, como Turquía. Aunque el CPT visitó Imrali en septiembre de 2022, el informe no se publicó debido a las obstrucciones turcas. El término legal para la situación de Öcalan es “incomunicación”, es decir, aislamiento absoluto. No sabemos cuánta comunicación tiene Öcalan con los otros tres presos de Imrali ni cómo lo tratan. La falta de información, incluso de su familia, es preocupante y no se puede normalizar.

El CPT ha respondido a las cartas de escritores, activistas y miembros del público, expresando su agradecimiento por el interés y afirmando que seguirán de cerca la situación. Sin embargo, para que el Consejo de Europa dé una respuesta concreta será necesario que una delegación del Comité de Ministros, integrado por los ministros de Asuntos Exteriores de los Estados miembros, llegue a Imrali.

-¿Cuáles son los próximos pasos en esta campaña por la libertad de Abdullah Öcalan?

La campaña se titula “Libertad para Abdullah Öcalan, solución política a la cuestión kurda”. Para alcanzar estos objetivos, tenemos previsto intensificar nuestros esfuerzos en muchos frentes: político, diplomático, artístico y cultural. Seguiremos movilizando redes mundiales contra el racismo, el autoritarismo y todas las formas de reacción. Las distintas etapas de la campaña se anunciarán en los medios de comunicación.

Es importante destacar que Abdullah Öcalan es actualmente el prisionero más aislado del mundo. Las condiciones en Imrali son, en mi opinión, incluso peores que las de Guantánamo. Imrali simboliza la lucha del pueblo kurdo por la libertad. En Turquía, por ejemplo, se están eliminando incluso las señales de tráfico kurdas como parte de las políticas antikurdas del Estado, lo que está llevando al país a una peligrosa división.

Esta campaña debe contar con el apoyo de todas las fuerzas democráticas. La comunidad internacional de derechos humanos ha comenzado a hacer oír su voz con mayor fuerza y ​​esto debe continuar. El 1 de septiembre se celebró en Berlín una importante reunión intelectual en la que se hicieron importantes llamamientos. Esta campaña debe contar con el apoyo de todos, especialmente para fortalecer la oposición democrática en Turquía.

-¿Cuánto tiempo durará esta campaña?

-La campaña continuará hasta que Abdullah Öcalan sea liberado. Su libertad está vinculada a la solución política de la cuestión kurda y a la democratización de Turquía. Como he mencionado antes, la situación de Öcalan puede compararse con la de Nelson Mandela en Sudáfrica. Así como la libertad de Mandela dependía del fin del apartheid, la libertad de Öcalan depende de la solución de la cuestión kurda y de la democratización de Oriente Próximo. Esta campaña continuará hasta su liberación.

-¿Tiene un mensaje para el pueblo kurdo y sus aliados?

-En primer lugar, quisiera expresar mi gratitud a los activistas, socialistas, demócratas y premios Nobel que han apoyado esta campaña. Su oposición a las injusticias contra el pueblo kurdo y su apoyo a la libertad de Öcalan son muy valiosos. Nos muestran que no estamos solos en esta lucha y que estamos en el camino correcto.

El pueblo kurdo, tanto en Turquía como en la diáspora, ha seguido apoyando a Öcalan y ha profundizado su comprensión de su paradigma. Les pido que fortalezcan su lucha, diversifiquen sus acciones y ejerzan una presión creativa sobre los mecanismos estatales. Sólo uniéndonos y construyendo una campaña de solidaridad internacional podremos lograr resultados. Cuanto más amplios y persistentes sean nuestros esfuerzos, más pronto veremos el éxito.

FUENTE: Medya News / Traducción y edición: Kurdistán América Latina

martes, octubre 29th, 2024